
A veces ese pasado se introduce durante unos instantes en este presente, en esta memoria, recordando tanto los buenos momentos como los no tan buenos.
Eso me pasa a lo largo de mi presente, y a veces esos recuerdos, ese pasado, que no deberían ser más que eso, se convierten en algo más, recorre mi cuerpo y mi mente e intentan volver a fluir sentimientos y emociones caducas.
Entonces cambia mi estado de ánimo, mi fortaleza se debilita y me inundan malos sentimientos y emociones cruzadas…
Para vencer esos fantasmas miro de frente, piso fuerte en la tierra y busco en mi corazón lo que ahora siento de verdad… Felicidad, Bienestar, Plenitud, Tranquilidad, Confianza, Libertad, Amor…
Haces bien. Mirar al frente dejando lo pasado es un buen ejercicio para caminar firme.
ResponderEliminarY te comprendo... por ahí, también he pasado.
Un abrazo.
Estimada Concha, creo que todos en algún momento de nuestra vida, nos encontramos con dudas y emociones pasadas que chocan en tu presente. Un abrazo muy fuerte
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